La mira del director técnico de River está puesta en el duelo del próximo 17 de septiembre ante San Pablo, en Brasil


El tiempo es oro. La aguja no se detiene y el margen cada vez es menor. La Conmebol se mantiene firme en su postura de volver a la actividad y dispuso que el próximo 17 de septiembre River viaje a Brasil para enfrentar al San Pablo de Dani Alves. El Millonario no juega por los puntos desde el 11 de marzo, cuando goleó por 8 a 0 a Binacional de Perú.

Queda menos de un mes y Marcelo Gallardo busca optimizar al máximo el tiempo que le resta de cara a la reanudación de la máxima competencia continental. Tras descartar por completo el ofrecimiento de Martín Yeza, intendente de Pinamar, de crear una “burbuja sanitaria” para el plantel millonario en esa localidad balnearia, algo similar a lo que ocurre con la selección femenina de hockey (al ser profesionales olímpicas clasificadas para Tokio 2020, cuentan con un permiso nacional para poder ingresar a cualquier destino de todo el país), el cuerpo técnico tiene en mente realizar una mini-pretemporada en el River Camp.

Con el aval de los protocolos para hacer fútbol 11 a partir de la próxima semana, la intención del club de Núñez es concentrar en un hotel cercano al campo de entrenamientos ubicado en Ezeiza. Durante ese lapso (sería alrededor de 14 días) pasará a ponerse énfasis en la pelota, mediante trabajos tácticos y de técnica individual.

Por su parte, durante esta semana los entrenamientos del primer equipo constaran de dos turnos, en los cuales los futbolistas se movieron en tres grupos en diferentes canchas del predio. Los jugadores de campo realizaron trabajos físicos y técnicos, mientras que los arqueros hicieron ejercicios específicos del puesto. El único que trabajó de manera diferenciada es el juvenil Benajmín Rollheiser, quien se encuentra en la etapa final de su recuperación. Ezequiel Centurión, por su parte, se encuentra en su casa realizando la cuarentena correspondiente, luego de dar positivo en un test de coronavirus.

Vale destacar que el River Camp es un predio que en el último tiempo tuvo importantes mejoras. Cuenta con un total de 14 hectáreas -todas con wifi- y más de 1100 metros cuadrados de obra civil. 7 canchas de fútbol (tres tienen las mismas dimensiones que las del Monumental), riego automático, vestuarios, sector de masajes, jacuzzi para los jugadores y nuevos departamentos de kinesiología, neurociencia, psicología y nutrición.

El primer compromiso oficial para River será el jueves 17 de septiembre ante el San Pablo de Dani Alves en Brasil. A los pocos días deberá tomar nuevamente un avión para enfrentar el 22 a Deportivo Binacional de Perú. Luego, el 30 recibirá a San Pablo y cerrará su participación el 20 de octubre ante Liga de Quito como local. Tras solamente disputadas dos jornadas, todos los integrantes del Grupo D de la Copa Libertadores ostentan 3 unidades.

De cara a ese compromiso ante el cuadro paulista a finales del próximo mes, en River estudian el escenario para hacer de local, ya que el Monumental se encontrará en plenas reformas. El Muñeco quiere que el escenario elegido cuente con un campo de juego en excelentes condiciones.

La primera posibilidad fue el José Amalfitani, pero esta chance perdió terreno en las últimas horas debido a que Conmebol solicita como requisito que tenga instalado un nuevo sistema lumínico led. Ante este escenario el Libertadores de América de Independiente podría ser una variante.