El entrenador del Equipo Nacional de Canotaje nos cuenta como fue la experiencia de Tokio 2020 de cara a los próximos Juegos Olímpicos en Paris 2024.
Por: Nahuel Leto


Nos remontamos a los juegos de Tokio 2020, las complicaciones, la pandemia, la preparación, Diego Canepa nos cuenta con lujo de detalles todo el recorrido “La preparación fue bastante dura, tuvimos que implementar diferentes estrategias para buscar el rendimiento, en el marco que estábamos viviendo a nivel mundial”.

En relación a la primer competencia internacional pos pandemia, en Szegued, Hungría, nos dice “Cuando fuimos a la copa del mundo en mayo, había una incertidumbre muy grande teníamos la intención de hacer una experiencia competitiva previa a los juegos olímpicos y pegamos un golpe de timón importante”.

El escenario de cara al invierno se presentaba complicado con las restricciones en Argentina, en relación a esto el entrenador nacional nos comenta “Tomamos la decisión en el último momento y ya casi saliendo, porque los deportistas fueron los que marcaron el rumbo, armamos un centro de entrenamiento improvisado en Europa. Esa fue la primera decisión estratégica importante”. En cuanto al clima que vivieron lejos de casa nos dice “Estar fuera, tanto tiempo, fue duro, pero vivimos un clima muy bueno. Estábamos en un hotel que es un centro de entrenamiento de remo, que lo usa mucho el equipo inglés y en ese primer desvió nos encontramos con el equipo checo que nos invitaron a hacer varios entrenamientos con ellos, el equipo portugués y español dos equipos de elite con los cuales también pudimos entrenar juntos”.

En relación a la experiencia en Tokio, Canepa plantea lo siguiente para analizarlo “Hay que dividirlo en dos etapas, la primera es la etapa previa, el reglamento te permite entrar tres días antes a la villa, la diferencia horaria que hay, inclusive con Europa, es de 8 horas, había que hacer una adaptación un poco más larga”, y continuó.

“El comité olímpico ya para el 2020 había hecho un convenio con la ciudad de Shimosuwa, el lugar era bueno, pero justo en ese momento Japón entró en restricciones más duras, por lo tanto no pudimos ir, se armó un lugar de contingencia que era bastante rudimentario en cuanto a su organización”.

“Y después la segunda etapa de entrada a la Villa Olímpica, era como sentir la libertad, si bien era una gran burbuja, estaba muy bien preparada con un montón de cosas resueltas. Había que tener los cuidados igualmente, que nosotros extremamos desde el inicio, antes de viajar a Tokio para no arriesgar a perder el trabajo de cuatro años”.

Con respecto al aspecto deportivo y el rendimiento en la competencia el entrenador del seleccionado nacional afirmó “Si, la verdad que la incertidumbre del rendimiento la ponía toda esta situación, pero al entrenar en Europa y con deportistas de nivel, más teniendo en cuenta que en el último evento de Agustín Vernice había sido finalista del mundo en el 2019, vas con la idea de pelear una medalla en la final”.

“Una lesión rara previa al evento y también el stress, hizo que la copa del mundo no fuera muy buena, eso en un momento fue como un golpe, que estuvo bueno ya que dio a pensar que hay que ganársela. Al entrar el campamento internacional y ver que estábamos muy bien en los entrenamientos del día a día y en muchos entrenamientos de intensidad, nos dimos cuenta que teníamos chances reales de estar en una buena posición, aspirábamos a estar, por lo menos, entre los cinco primeros”.

“Lo que más me dejo tranquilo es que él (por Agustín Vernice) en la semifinal bate el record olímpico que estaba instaurado desde el año 1996” y continua “Desde el punto de vista del rendimiento fue muy bueno y desde el punto de vista del resultado podría haber sido un poquitito mejor”.

En cuanto a la pista de competencia “No conocíamos la pista de Tokio y nos apoyamos en los colegas internacionales para testearla”, estamos hablando de que centésimas son los que definen una medalla, ósea que un viento o una ola te cambia el resultado “no en todas las pistas, algunas están preparadas y otras no, también hay cambios en cuestión de sensaciones con agua dulce y agua salada, en la pista había un viento a favor que a Agustín le sintió bien, el poder gestionar entrar un día antes a la villa olímpica mejoro el poder aclimatarse mejor”.

Terminaron los juegos pero no se terminó el 2021, en cuanto a esto Canepa concluye “Posterior a los juegos tuvimos Mundial Sub 23 que tuvimos a un atleta Agustín Rodríguez que fue quinto en la competencia y perdió por nada la medalla de bronce, en Rumania fue subcampeón mundial en la maratón de canotaje, hicimos un buen trabajó en conjunto con Agustín Vernice. Post Tokio 2020 obligo a volver a salir y ahora está los Juegos Panamericano Juveniles, a la cual le damos mucha importancia, la categoría Sub 21 necesitamos que este fuerte para abastecer a la categoría senior”.