Cortar el akusay en cuatro partes. Enjuagarlo con agua fría o tibia. A cada capa del repollo, sobre la parte del tronco, espolvorearle 100 gramos de sal. Colocarlo en un bol durante dos horas.
Paso 2
Volver a distribuir el akusay para que los de arriba vayan abajo y viceversa, así la sal actúa de manera pareja. Dejarlos dos horas más.
Paso 3
Cuando el repollo esté flexible, lavarlo tres veces en agua fría y dejar escurrir en un colador. Cortar el nabo y sumarle el ají molido.
Paso 4
Procesar la cebolla, el ajo, el jengibre, el arroz cocido y el agua. Unir todos los ingredientes con la mano y frotar todas las hojas del akusay. Dejar fermentar un día a temperatura ambiente y luego colocar en un recipiente con cierre hermético y llevar a la heladera.