La dirigencia de River Plate inició acciones legales contra el empresario estadounidense Foster Gillett y sus intermediarios tras el fallido traspaso de Rodrigo Villagra.
La denuncia penal, que también involucra a Guillermo Tofoni y Juan Manuel Cobián, es por estafa y desbaratamiento de derechos acordados, según los artículos 172 y 173 inciso 11 del Código Penal Nacional. La operación de venta del mediocampista a través del grupo de Gillett nunca se concretó, lo que generó un perjuicio económico para el club.
El empresario, que llegó al fútbol argentino de la mano de Juan Sebastián Verón y con vínculos con el actual gobierno nacional, se había comprometido a pagar alrededor de 11.5 millones de dólares por Villagra. De este monto, River recibiría aproximadamente 9 millones netos. Sin embargo, tras varias semanas de espera y sin respuestas por parte de Gillett, la dirigencia decidió tomar medidas judiciales.
La denuncia presentada sostiene que la maniobra desplegada por los empresarios causó graves perjuicios al patrimonio del club. Además, se ordenó un allanamiento en las oficinas de algunos de los implicados, con el fin de obtener los domicilios de los involucrados y secuestrar documentación relevante para la causa.
El caso de Villagra no fue el único en el que Gillett estuvo involucrado durante el mercado de pases. También quedaron en el centro de la escena Vélez y el defensor Valentín Gómez, quien ahora debió retornar al Fortín tras entrenarse durante un tiempo fuera del equipo con la esperanza de marcharse al exterior.