Franco Colapinto, una de las grandes promesas del automovilismo argentino, sorprendió con una declaración sincera sobre su situación actual dentro del equipo Alpine de Fórmula 2. El joven piloto, de 21 años, admitió que no está atravesando un buen momento y que las expectativas que rodean su carrera le suman una presión extra.
“Es complicado. No la estoy pasando bien. Estoy aprendiendo un montón, pero la verdad es que no me divierte como me divertía antes”, confesó Colapinto en diálogo con la prensa, dejando en evidencia el lado B de la alta competencia y las exigencias de estar bajo la órbita de un equipo de Fórmula 1.
El piloto de Pilar forma parte del programa de jóvenes talentos de Alpine, la escudería que compite en la F1. Su objetivo declarado es llegar a la máxima categoría, pero las dificultades deportivas y la falta de resultados lo tienen en una situación incómoda.
“Hay mucha presión. Cada carrera es una evaluación. Te jugás el futuro todo el tiempo”, contó Colapinto, quien actualmente se encuentra en mitad de tabla del campeonato de F2 y sueña con dar el salto definitivo.
El piloto argentino remarcó que, a pesar del mal momento, no pierde la motivación: “Sigo dando todo para mejorar. Sé que esto es parte del proceso y que tengo que superar estos obstáculos”.
Colapinto es una de las mayores apuestas del automovilismo nacional para volver a tener un piloto argentino en la Fórmula 1, algo que no sucede desde la salida de Gastón Mazzacane en 2001.
Con talento de sobra y el respaldo de Alpine, su gran desafío es recuperar la confianza y sostener el rendimiento para seguir en carrera hacia el sueño mayor: correr en la F1.