Javier Alonso, ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, apuntó directamente contra la CONMEBOL y la seguridad privada del club, responsabilizándolas por la escalada de violencia en el partido entre Independiente y Universidad de Chile por la Copa Sudamericana. Según Alonso, se pudo haber evitado la violencia si la CONMEBOL y el club local hubieran acatado las advertencias de la policía.
En una entrevista con Infobae en Vivo, el ministro explicó que los incidentes comenzaron cuando los hinchas visitantes empezaron a lanzar objetos a los hinchas locales desde la bandeja superior de la tribuna. Pese a que se recomendó la suspensión del partido para desalojar la tribuna, el delegado de la CONMEBOL rechazó la sugerencia.
Fallas en el protocolo de seguridad
Alonso enfatizó que los protocolos de seguridad exigidos para partidos internacionales «no se cumplieron». Subrayó que, a diferencia de lo que pasó en el interior del estadio, en el exterior, bajo el control de la Policía de la Provincia, no hubo incidentes. La responsabilidad de lo que ocurrió adentro, según el funcionario, era de la seguridad privada del club.
«No había una línea de seguridad privada que impidiera a los hinchas balconear hacia la parte de abajo. Eso fue clave para que la situación se descontrolara», señaló. El ministro también criticó la demora en la toma de decisiones por parte de la CONMEBOL, ya que el comité de crisis que debía presidir la entidad se dilató innecesariamente. «Si el partido se suspendía en el primer tiempo, no hubiese pasado nada de lo que pasó», aseguró.