Ángel Di María confirmó su salida del Benfica el domingo pasado después de que su equipo se privara de dar la vuelta olímpica en Portugal tras el empate como visitante del Vitória Guimaraes.

“Fue mi último partido de campeonato con esta camiseta y estoy orgulloso de haber podido volver a vestirla”, fue el mensaje del Fideo, quien igualmente se prepara para afrontar la final de la Copa de Portugal este domingo contra Sporting Lisboa, campeón de liga.

El rosarino de 37 años descartó propuestas millonarias del exterior y volverá a su ciudad natal. De hecho, tiene avanzada la mudanza de su familia y debate internamente si seguirá jugando al fútbol. Según le confiaron a Infobae, Di María baraja dos opciones: jugar en Rosario Central o retirarse del fútbol.

De esta forma, Di María podría cumplir el sueño de jugar nuevamente en el club que lo formó.

La agenda personal de Di María indica que este domingo jugará el último partido con la camiseta de Benfica en suelo luso. Será en el estadio Nacional, contra Sporting de Lisboa, por la final de la Taça de Portugal.

El fin de semana puede llegar a despejar interrogantes sobre su futuro, sabiendo que el Mundial de Clubes está a la vuelta de la esquina: los dirigidos por el portugués Bruno Lage se medirán con Boca el lunes 16 de junio, chocarán con Auckland City de Nueva Zelanda el viernes 20/6 y cerrarán la fase de grupos ante Bayern Múnich el martes 24/6. El contrato del Fideo expira el 30 de junio.

A partir de ahora, será trascendental el operativo “seducción” por parte de la directiva de Central, así como también el apoyo de Claudio Tapia, que tiene buena relación con el campeón del mundo y tiene claro que la presencia de uno de los máximos ídolos de la historia de la selección argentina servirá para potenciar la liga doméstica y vender “El Producto” hacia el exterior.