El Ejecutivo argentino implementó cambios en la normativa sobre armas de uso civil, habilitando su utilización en competiciones y prácticas deportivas. El ajuste responde a la política de flexibilización iniciada en diciembre pasado, cuando se redujo la edad mínima para la tenencia de armas de 21 a 18 años.
La modificación se plasmó en una nueva disposición de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC), que elimina ciertas barreras administrativas y permite el uso deportivo de rifles y pistolas semiautomáticas. No obstante, mantiene los controles previos: registro, análisis psicofísico, examen de idoneidad y antecedentes, además del resguardo de medidas de seguridad .
Juan Pablo Allan, titular de ANMAC, destacó que el objetivo es “modernizar trámites y reducir cargas burocráticas”, en sintonía con el decreto que bajó la edad mínima.
Principales puntos de la reforma:
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Edad mínima: se mantiene en 18 años para tenencia y portación.
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Uso deportivo: autorizan armas semiautomáticas para tiro deportivo en clubes habilitados.
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Digitalización: trámites 100 % online a través de MiAnmac.
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Controles vigentes: se requiere examen psicofísico, idoneidad, antecedentes limpios y registro.
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Reducción de exigencias: se elimina informes municipales y registros adicionales para fabricantes, talleres y entidades de tiro.
Impacto y perspectivas
Los clubes de tiro podrían beneficiarse con mayor afluencia de deportistas y mejores condiciones operativas. En paralelo, el cambio plantea desafíos para la supervisión y seguridad: organizaciones civiles reclaman que se restauren controles adicionales y la transparencia en la emisión de permisos.
