El uruguayo Santiago “Tato” Algorta se consagró ganador tras una final cargada de emociones, sorpresas y el voto del público. Una victoria largamente esperada que corona su perseverancia dentro de la casa.
En una noche cargada de tensión y emoción, Santiago “Tato” Algorta fue elegido como el gran ganador de Gran Hermano 2025, tras enfrentar a sus rivales en la gala decisiva emitida el 25 de junio. El mismo conductor del reality, Santiago del Moro, anunció la coronación entre aplausos y lágrimas.
A lo largo de los más de seis meses de emisión, Tato supo destacarse por su estrategia, constancia, y por momentos de notable sensibilidad: desde su emotivo llanto tras la salida de Luciana hasta su tremendo apoyo al reencontrarse con su familia. Entre sus logros también se cuentan múltiples victorias en los desafíos de líder, algunos de ellos rodeados de controversias.
Su paso por el reality no estuvo exento de críticas: en más de una ocasión fue señalado por decisiones polémicas, incluyendo motivos de tintes sexistas y estrategias divisivas que generaron acalorados debates.
Este triunfo lo convierte en el segundo uruguayo en consagrarse en la franquicia argentina —un recorrido similar al de Bautista Mascia, ganador de la edición anterior. Además del título, Algorta se alzó con el primer premio de AR$ 70 millones, junto a beneficios complementarios como vivienda, vehículos y otros obsequios para los finalistas.
Al momento del anuncio, Tato no pudo contener su emoción y fue ovacionado por los restantes finalistas y el público. Con la voz entrecortada, agradeció a su familia, a quienes retomará la vida cotidiana con un reencuentro planeado en Uruguay y un merecido descanso tras meses de competencia.
