Durante su traslado judicial hacia Concordia, Entre Ríos, el principal acusado del doble femicidio en Córdoba, Pablo Laurta, dio sus primeras declaraciones: “Todo fue por justicia”, expresó con frialdad ante los medios.
Laurta fue detenido después de que las autoridades localizaran a su hijo de cinco años, luego de que huyera tras cometer los asesinatos de su expareja, Luna Giardina (24), y su madre, Mariel Zamudio (54), dentro de la vivienda familiar.
Mientras es trasladado, Laurta también enfrenta acusaciones por un tercer homicidio, el del chofer de aplicación Sebastián Martín Palacios (49), cuyo cuerpo mutilado fue encontrado en Entre Ríos y su auto incendiado en Córdoba.
El caso conmocionó a Córdoba y a todo el país por su brutalidad: se investiga cómo el acusado ingresó al domicilio, cometió los crímenes y escapó con el niño, intentando cruzar hacia Uruguay.