Será este viernes 1, a las 20h, en el Paseo de las Artes, ubicado en Casullo y Rivadavia, Morón, con un cierre musical a cargo de Ella es tan cargosa. También allí, el sábado y domingo, desde las 15h, se realizará el Festival Oeste Rock.
El Gobierno de Morón presenta el libro “El agite”, una investigación periodística centrada en la producción musical de rock del Oeste del Conurbano bonaerense, con el objetivo de interpretar la prolífica expresión de este género, nacida en la zona que abarca las localidades de Hurlingham, Ciudad Jardín, El Palomar, San Justo, Ramos Mejía, Morón, Haedo, Castelar e Ituzaingó, y que ha logrado trascender las fronteras hacia la escena musical nacional.
La publicación es el resultado de un proyecto ideado por la Dirección de Arte y Cultura de Morón, en colaboración con el instituto Histórico Municipal y con el apoyo del Ministerio de Gestión Cultural de la Provincia de Buenos Aires, que contó con la participación de cientos de vecinos que hicieron llegar sus testimonios fotográficos de El Reloj, Sumo, Las Pelotas, Divididos, Los Piojos, Los Caballeros de la Quema, Árbol, Naranjos, Ojas y Guillermina, entre otras bandas, y las imágenes que ilustran el libro fueron seleccionadas por la reconocida fotógrafa de rock Nora Lezano.
Diversas corrientes han estudiado el rock como un fenómeno cultural y también político. Fue considerado como una subcultura por los estudios culturales británicos y en Argentina ha sido afrontado como un sujeto político, o como un lugar que funciona a modo de relevo de otras esferas de la vida social, pero que no logra articular identidades sociales fuertes. Esta investigación sigue los planteos que abordan el rock nacional como un universo simbólico en el que los sujetos construyen sus identidades.
En base a este marco de análisis, “El agite” reconstruye no sólo el pasado y desarrollo de las bandas más trascendentes de la región, sino también la historia del “universo simbólico”, de una subcultura rockera vivida por músicos y seguidores que, en algún momento de su adolescencia adoptaron una identidad alternativa: el “ser rockero”.
Es un recorrido sobre las modas y estéticas que fueron cambiando según las épocas, los recuerdos sobre los espacios rockeros y lugares de reunión, con el objetivo de que el lector se encuentre identificado con aquellas experiencias como los recitales, se emocione con relatos, fanatismos, anécdotas y mitos del Oeste. En este apasionante viaje a través del tiempo y el rock, también se intenta identificar las características que distinguen al rock del Oeste, verdadero patrimonio cultural local.
