Bajo el lema “Nosotros podemos. Yo puedo”, hoy, 4 de febrero, se celebra el Día Mundial contra el Cáncer. La iniciativa, promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Unión Internacional contra el Cáncer (UICC), busca reducir el número de muertes que se pueden prevenir creando una mayor conciencia sobre la enfermedad.
En el marco de la jornada, se realiza un análisis de los tres tipos de cáncer que afectan a los argentinos.
Según estudios y averiguaciones realizadas por organizaciones que investigan la enfermedad que es responsable de 8,2 millones de fallecimientos cada año a nivel mundial, un 17 por ciento del total de la incidencia de cáncer en el país responde al cáncer de mama. Si bien es más frecuente en la mujer, esta patología no deja de lado a los hombres, afectando a uno de cada 100.
En este tipo de casos, es vital la detección temprana como método preventivo. “El diagnóstico precoz aumenta la probabilidad de curación y, además, permite realizar tratamientos menos invasivos para las pacientes, con mejores resultados estéticos”, destacó el oncólogo Juan Manuel O’Connor, médico del Instituto Alexander Fleming.
A la hora de detectar el cáncer de mama, la mamografía continúa siendo la herramienta más efectiva. Cabe destacar que los avances científicos han logrado diversificar las estrategias de tratamiento para adaptarlas a las particularidades de cada paciente.
Según estadísticas de la Liga Argentina de Lucha contra el Cáncer (LALCEC), es el tipo de cáncer que más afecta a los hombres y el tercero en el caso de las mujeres. Está comúnmente asociado con el hábito de fumar, aunque es posible contraerlo aun sin haberlo hecho.
El 60 por ciento de los casos de cáncer de pulmón de células no pequeñas (NSCLC), la forma más común de la enfermedad, están provocados por alteraciones genéticas.
Más del cincuenta por ciento de los casos se detectan en la etapa avanzada de la enfermedad, cuando se registran metástasis en otras regiones del cuerpo.
Las terapias personalizadas en cáncer de pulmón avanzado con metástasis han revolucionado a la enfermedad en los últimos años. Estas permiten detectar en un grupo de pacientes, cuál es la vía que conduce al tumor, y así comenzar a trabajar con el objetivo de cronificarlo.
En el caso del cáncer de colon, es posible la detección temprana debido a su lento progreso. Aunque popularmente se cree que afecta más a hombre que a mujeres, las estadísticas marcan que se desarrolla casi con el mismo nivel de prevalencia en ambos sexos.
Se desarrolla por factores hereditarios y ambientales. Por eso, se recomienda mantener hábitos de vida saludables, como la actividad física y la alimentación adecuada, con el fin de disminuir el riesgo de desarrollar la enfermedad.
El primer paso que deben dar aquellos que tienen predisposición hereditaria a sufrir este cáncer consiste en realizarse un test de sangre oculta en materia fecal, el cual permite detectar muy pequeñas cantidades de sangre y descubrir si existen pólipos o adenomas, que luego puedan derivar en células malignas.
Además, para diagnosticar la enfermedad, se puede realizar una colonoscopía, a través de la cual se puede ver el interior del intestino y verificar si existe o no alguna anomalía.