Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades revisarán sus lineamientos habilitando que el tiempo de aislamiento sea sensiblemente menor, de acuerdo a reportes de la prensa estadounidense


Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) podrían publicar en los próximos días una actualización de la indicaciones en torno al tiempo de cuarentena para los Estados Unidos, de acuerdo a información publicada este martes por la cadena Fox News.

De esta manera, la cuarentena para aquellos que podrían haber estado expuestos al covid-19 se reduciría de 14 a 7 días, en el caso de quienes presenten una prueba negativa, y a 10 días para aquellos no se sometan al test de PCR.

La cadena de noticias estadounidense obtuvo un documento interno de los CDC el martes que describía los cambios propuestos. Además, una fuente confirmó que dichos cambios habían sido discutidos y aprobados por el Grupo de Trabajo sobre el Coronavirus de la Casa Blanca.

Se espera que los CDC publiquen la guía revisada el miércoles, dijo una fuente a Fox News.

“La cuarentena sirve para aislar a alguien que podría haber estado expuesto al COVID-19. Ayuda a prevenir la propagación de enfermedades que podrían ocurrir antes de que alguien incluso sepa que tiene el virus“, afirma el documento.

Y agrega: “Los CDC y otros científicos han explorado cambiar la recomendación actual de la cuarentena durante 14 días”.

“Reducir la duración de la cuarentena puede aumentar el cumplimiento, al reducir las dificultades económicas”, explican, y añaden que “la reducción del tiempo reducirá el estrés en el sistema de salud pública, especialmente en momentos en que las nuevas infecciones están aumentando rápidamente”.

El documento establece que “según los recursos locales, la cuarentena puede finalizar el día 7 después de recibir un resultado negativo de la prueba” o el “día 10 sin prueba”.

“Después de completar la cuarentena la persona deberá estar atenta a los síntomas hasta 14 días después de la exposición al virus; si tiene síntomas, debe aislarse de inmediato y comunicarse con la autoridad sanitaria local o su proveedor de atención médica; usar una máscara, mantenerse a dos metros de distancia de los demás, lavarse las manos, evitar las multitudes y otras medidas para prevenir la propagación del COVID-19“, continúan las recomendaciones.

El lunes, Estados Unidos alcanzó la cifra de 13.525.889 casos confirmados del coronavirus SARS-CoV-2 y la de 267.888 fallecidos por la enfermedad de la covid-19, de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.

El estado de Nueva York sigue como el más golpeado del país con 34.605 muertos, seguido por Texas (21.896), California (19.153), Florida (18.597) y Nueva Jersey (16.993).

El balance provisional de fallecidos -267.888- supera con creces la cota más baja de las estimaciones iniciales de la Casa Blanca, que proyectó en el mejor de los casos entre 100.000 y 240.000 muertes a causa de la pandemia.

El presidente estadounidense, Donald Trump, rebajó esas estimaciones y se mostró confiado en que la cifra final estaría más bien entre los 50.000 y 60.000 fallecidos, aunque luego auguró hasta 110.000 muertos, un número que también se ha superado.

Por su parte, el Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud (IHME) de la Universidad de Washington, en cuyos modelos de predicción de la evolución de la pandemia se fija a menudo la Casa Blanca, calcula que cuando Trump abandone el poder el próximo 20 de enero habrán muerto 385.000 personas y para el 1 de marzo 470.000.