Hace dos semanas, la capital retrocedió de fase en el plan de transición a la normalidad, y volvió a tener cuarentenas los fines de semanas y los festivos, una medida que se mantendrá hasta el próximo 4 de enero y que regirá los días 25 de diciembre y 1 de enero
Las autoridades sanitarias de Chile informaron este lunes que adelantarán dos horas el toque de queda en todo el territorio a partir del 26 de diciembre y mantendrán la cuarentena en la Región Metropolitana, que alberga la capital, en Navidad y Año Nuevo, por el reciente aumento de casos.
“Ha continuado el incremento en el número de contagios en la capital entre un 15 y un 17 %. Hoy estamos en una situación vulnerable y por eso hemos decretado estas medidas”, sostuvo la subsecretaria de Salud, Paula Daza.
El toque de queda, vigente desde que se registraron los primeros casos en marzo, regirá desde el 26 de diciembre a partir de las 22.00 horas, en vez de las 00.00 horas, y hasta las 5.00 horas en toda la nación.
Hace dos semanas, la capital retrocedió de fase en el plan de transición a la normalidad, y volvió a tener cuarentenas los fines de semanas y los festivos, una medida que se mantendrá hasta el próximo 4 de enero y que regirá los días 25 de diciembre y 1 de enero, aclararon las autoridades.
Los días 24 y 31 de diciembre, al ser laborales, sí se podrá transitar libremente por la capital y se podrán hacer reuniones de máximo 15 personas con toque de queda ampliado que comenzará a las 2.00 horas, aunque estará prohibido salir de la región.
En el resto del país las restricciones variarán en función de la epidemiología del virus. En las ciudades con una situación más favorable se podrán hacer reuniones de hasta 30 personas, y en las peores, algunas zonas aisladas del sur del país, regirá confinamiento obligatorio durante todas las festividades.
Chile, que sumó en las últimas 24 horas 1.943 contagios y 43 decesos por SARS-CoV-2, ha registrado en las últimas dos semanas un leve alza en el número de casos diarios, especialmente en la Región Metropolitana, en la que viven 7 millones de habitantes, y que en junio estuvo al borde del colapso sanitario.
Entre septiembre y diciembre la pandemia registró un marcado retroceso con tasas de positividad que se mantuvieron por debajo del 5 % a escala nacional y cifras de contagios diarios y decesos que se mantenían sin grandes altibajos.
Hasta la fecha, la covid-19 deja 16.197 fallecidos en el país austral y 587.488 infectados, de los cuales sólo 13.047 se encuentran activos, lo que significa que pueden contagiar.
Tras realizar en las últimas 24 horas 45.693 pruebas PCR, que dejaron una tasa de positividad a nivel nacional del 4 %, Chile supera ya los 6 millones de test desde marzo, y se ubica como el país que más exámenes ha hecho por millón de habitantes en la región y uno de los primeros a nivel mundial.
La semana pasada, el Gobierno aprobó la vacuna de Pfizer de la que recibirá 20.000 dosis esta semana que se usarán para inocular al personal sanitario en las regiones más críticas, en las que ya se han dispuesto los congeladores y la infraestructura necesaria.