En la Plaza Carlos Gardel, familiares, vecinos y miembros del Poder Ejecutivo y Legislativo de la Comuna colocaron una placa conmemorativa en memoria de Mauricio Villalba, desaparecido y asesinado durante una de las épocas más oscuras de nuestra historia.
El ‘Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia’ es una fecha en la que se conmemora a las víctimas y busca mantener vivos en la reflexión y memoria social los tristes acontecimientos producidos en la última dictadura militar que gobernó el país. Esta fecha fue establecida en el año 2002 por la Ley de la Nación N° 25.633, cuyo artículo 1º establece: “Institúyase el 24 de marzo como Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia en conmemoración de quienes resultaron víctimas del proceso iniciado en esa fecha del año 1976″.
Hoy, el Municipio de San Fernando llevó adelante un emotivo acto en la Plaza Carlos Gardel en el que se recordó y homenajeó a Mauricio Villalba, vecino del barrio, quien fue víctima de la última dictadura militar. Familiares y funcionarios acompañaron la colocación de una ofrenda floral y el descubrimiento de una placa lleva la siguiente leyenda: “A la memoria del vecino desaparecido por el Golpe de Estado de 1976. Juan Mauricio Villalba Moreno. Fecha de nacimiento 18 de noviembre de 1930. Fecha de desaparición 25 de mayo de 1976. Fecha de asesinato 4 de julio de 1976”.
La Coordinadora de Derechos Humanos del Municipio, Cristina Maderna, sostuvo: «Este 24 es muy emotivo porque se trata de una compañera de trabajo. Cuando conocí la historia de su papá dije algún día nosotros vamos a tener que hacer algo por Mauricio (Villalba). Estoy muy emocionada. Es un 24 de marzo más que el Municipio acompaña cómo corresponde porque en realidad los Derechos Humanos somos todos. Está bien que sigamos acompañando».
Falimiares de Mauricio Villalba agradecieron la acción de la Comuna y se mostraron muy emocionados. Alejandro Villalba, uno de sus hijos, expresó: «Cómo dije recién se agradece esto porque es algo bueno, no quisiera decir que es algo lindo porque me gustaría tener a mi papá acá y comer un asado, compartir un partido de fútbol o mirar una película con él. Hemos pasado por cosas muy feas, no solamente que fue desaparecido, sino que, al momento de ir a llorarlo, pasado el tiempo descubrimos que no estaba en esa tumba y otra vez estaba desaparecido. Entonces te preguntas y ¿dónde está? Son trompadas de la vida que uno tiene que seguir adelante. Se sale con amigos, con familia, es lo cotidiano de la vida».
Por su parte, Alejandra Villalba, hija de Mauricio, agregó: «Estoy totalmente agradecida porque nosotros nunca tuvimos oportunidad de hacer un sepelio, una despedida porque se lo llevaron. Después apareció, pero no pudimos hacer nada. Esto es como una recompensa para que podamos hacerle el homenaje como él quería, en su lugar donde todos los domingos jugaba al fútbol y con la gente y vecinos que nos conocen desde chicos. Estamos muy agradecidos a todos, mayormente al Intendente Andreotti por ocuparse de estos detalles que llenan la vida. Se revuelve todo otra vez, vuelve el dolor, la angustia, pero por otro lado estoy feliz porque pudimos hacerle un homenaje a mi papá que se lo merece».
Por último, Maderna manifestó emocionada: «Mauricio es del barrio, vivía acá a dos cuadras, cuando lo secuestraron lo hicieron en su casa. Él venía a jugar a esta plaza que era un potrero y a soñar que se podía hacer algo para la gente. Esa era su ideología política. Ahora nosotros le presentamos a los familiares este lugar. Había que hacerle un homenaje y este es el mejor».