En su denuncia que dio un fuerte vuelco a la investigación sobre la desaparición y posible muerte de su sobrino, Laudelina Peña aseguró que el chico fue atropellado por el marino retirado Carlos Pérez, acompañado de su mujer, María Caillava, mientras conducían una camioneta Ford Ranger blanca.
Una pericia de levantamiento de rastros en el vehículo, entonces, sería clave para ayudar a confirmar o desmentir sus dichos, hoy puestos en duda tanto por los investigadores de la Justicia federal como por sus propios familiares, como el padre de Loan, que la tratan de mentirosa.
La Ford Ranger fue analizada por la Policía de Corrientes, antes de que el caso pase a los fiscales Mariano de Guzmán y la PROTEX, con Alejandra Mangano y Marcelo Colombo. En ese estudio, se recuperaron rastros de la camioneta que hoy están en un laboratorio forense pero que, a priori, no se condicen con la hipótesis de un accidente.
Este último fin de semana, los fiscales federales ordenaron un nuevo estudio a la Unidad Criminalística de la Policía Federal para evacuar dudas. Esta nueva pericia se realizó ayer domingo en la Comisaría de 9 de Julio.
Tras su conclusión, los peritos analizaban sus resultados a comienzos de la mañana de hoy lunes. Los primeros resultados indican que no habría pruebas en la camioneta que indiquen a simple vista un posible accidente que le quitó la vida a Loan, aseguran fuentes del caso.
Se detectó que el guardabarro y el paragolpes estaban hundidos y que había pintura desprendida. También se encontraron “manchas rojas” que ahora serán analizadas para determinar si se trata de sangre. Los padres de Loan ya habían entregado su ADN para posibles cotejos al comienzo de la búsqueda del chico, en caso de que sea necesario un cotejo.