El Poder Ejecutivo publicó este viernes en el Boletín Oficial el decreto 439/2025, que reestablece los derechos de exportación más altos para cultivos de verano: la soja pasará del 26 % al 33 % y el maíz y sorgo del 9,5 % al 12 %, a partir del martes 1° de julio.

En contraste, el decreto prorroga la tasa reducida del 9,5 % para trigo y cebada hasta el 31 de marzo de 2026, como había anticipado el ministro Luis Caputo. 

La resolución establece nuevas condiciones para acceder a la reducción: exportadores de trigo y cebada deberán liquidar al menos el 90 % de las divisas en un plazo de 30 días hábiles tras presentar la Declaración Jurada de Venta al Exterior (DJVE), ampliando el plazo anterior de 15 días.

Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) manifestó “preocupación ante el impacto negativo” de la suba. Coninagro y la Sociedad Rural pidieron reglas más estables, mientras que la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro Exportador de Cereales (CIARA‑CEC) valoraron la prórroga para los cultivos de fina.

En las dos semanas previas al decreto, se registró un fuerte impulso a las declaraciones juradas DJVE: se anotaron 15,8 millones de toneladas de subproductos de soja, 6,5 millones de poroto, 3,8 millones de aceite y 17,9 millones de maíz, generando unos USD 5.000 M en liquidaciones.

El anuncio llega en la antesala de la exposición de La Rural, donde se espera la presencia presidencial, y marca el retorno de un esquema impositivo más exigente para el agro de verano.