En medio de la nueva suba de los dólares financieros, que ayer superaron los $1.200 en todas las versiones, el Gobierno le sugirió a los bancos que suban la tasa de plazos fijos.
El ministro de Economía pasó ese mensaje en el encuentro con del IAEF del martes, donde participaron cerca de 1.000 ejecutivos de finanzas. Explicó que está en pleno proceso el traspaso de la liquidez de los bancos desde pasivos remunerados del Banco Central a bonos emitidos por el Tesoro.
“En la última licitación pusimos la tasa de los títulos más alta que la de política monetaria del Banco Central, que en definitiva será casi testimonial”, expresó Caputo. La semana pasada el BCRA definió otra agresiva baja de tasas, desde el 50% al 40% anual, lo que llevó a una fuerte reducción del rendimiento de los plazos fijos que pagan los bancos.
Sin embargo, a las pocas horas, el Tesoro salió a colocar bonos y pago una tasa anual cercana al 48%. La respuesta fue inmediata: los bancos se pasaron masivamente a bonos y suscribieron más de $ 11 billones, con el objetivo de conseguir un rendimiento mayor.
“Los bancos deberían tener como referencia ahora la tasa del Tesoro y ya no la del Central para definir sus políticas”, expresó Caputo.
Fue una forma elegante de sugerir un incremento de las tasas que pagan a los ahorristas, teniendo en cuenta que ahora pueden colocar a niveles más altos al Tesoro.
Los bancos redujeron drásticamente la tasa de plazos fijos la semana pasada, lo que estaría directamente relacionada con la escalada de más del 20% que tuvo el dólar en lo que va de mayo.