AySA continúa trabajando en las obras de la redes de agua potable y cloacas en el Barrio Padre Ricciardelli, ex Villa 1-11-14, que beneficiará a más de 50 mil vecinas y vecinos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La red primaria de agua potable para el Barrio Padre Ricciardelli, contempla la instalación de 1760 metros de cañerías primarias y 4025 metros de secundarias que permitirán que el barrio pueda contar con el caudal de agua suficiente para poder abastecerse, mientras que el tendido de cloacas permitirán la instalación de 437 conexiones para prestar servicio a cada uno de los hogares.
Al respecto, la presidenta de AySA, Malena Galmarini, resaltó que “Seguimos trabajando en los barrios con los derechos más vulnerados, algo que para nosotros es sumamente importante. Con nuestra llegada a AySA, tomamos la decisión de también poner como prioridad a los barrios populares. Ellos también son ciudadanos y merecen que un Estado presente les traiga dignidad y reconocimiento”.
Por parte de la obra de agua, se trata tanto de la renovación y la instalación de la red de agua perimetral del barrio, y actualmente se trabaja en las calles Perito Moreno, Bonorino y Riestra con un avance de la obra que supera el 60%. Esta obra inició en el cruce de las calles Lautaro y Eva Perón, en el límite de Parque Chacabuco y el Bajo Flores. Allí se encuentra la punta del acueducto de 500 mm de diámetro de casi 2km de hierro fundido que abastecerá al barrio Ricciardelli.
En relación al trabajo territorial que realiza la empresa en los barrios, Lorena Pizzolini, referente de la Dirección de Desarrollo con la Comunidad de AySA manifiesta que “Hace muchos años que AySA está trabajando en este barrio, por suerte ahora pudimos traer la obra, pero a los vecinos se los conoce de hace mucho y los acompañamos en este sentido, en escucharlos fundamentalmente. Y ellos agradecen que estemos, creo es una de las cosas que más nos agradecen, que nos llaman, venimos y estamos. Es el rol social que intentamos cumplir en este y en otros barrios populares, cómo sanitaristas nos emociona”.
Por otro lado, la obra de cloacas transportará los líquidos del barrio hacia la Avenida Cruz, donde se empalmará a la red existente. Sobre esta obra, Joel Cuello, inspector de AySA detalló: “La obra está en un avance del 20%. Venimos con el colector cloacal que llega a la calle Perito Moreno. Nosotros estamos ahora por calle Riestra y este colector continúa por Perito Moreno aumentando su diámetro a medida que avanza y llegando hasta el diámetro de 700mm en la calle Cruz. Ahí vuelca sobre una boca de registro existente.”
Por su parte, Olga, vecina del barrio aseguró: “Estoy desde el 1981 acá, habían 2 sólo casitas. Nosotros íbamos a buscar agua, acarreábamos. No tenía luz, no tenía nada. Cuando hace calor, agua casi no hay. Muchos necesitan, hay niños, abuelos, niños con discapacidad y yo estoy muy feliz con el trabajo de AySA”. En esa línea, Daniel, otro vecino con 24 años en el barrio, señaló: “El servicio de AySA hace mucha falta por que en el verano sufrimos mucho. AySA siempre estuvo presente. Cuando tenemos problema de agua y se corta, recurrimos a los referentes y ellos siempre están”.
Saldando una deuda histórica y llevando una mejor calidad de vida de miles de vecinas y vecinos, el tendido de red en el barrio Padre Ricciardelli forma parte de un importante plan de obras impulsado por AySA que tiene por objetivo llevar los servicios de agua y cloacas a los barrios vulnerables dentro de su área de concesión. Bajo este plan, para el 2023, la empresa proyecta duplicar la cobertura de agua potable y triplicar la de cloacas en estos barrios beneficiando a más de 617.000 habitantes que esperan la llegada de estos servicios esenciales para el cuidado de su salud.