El sábado 23 de abril, desde las 14:00, en el Parque Público de Villa Adelina, (José M. Moreno y Colombres) se realizará la fiesta por el 113º aniversario de esta localidad. El Municipio de San Isidro organiza una celebración con kermesse y postas deportivas, puestos de comida y un cierre a todo ritmo con el show de La Bomba de Tiempo.


“Villa Adelina, nuestra localidad más joven, creció mucho en los últimos años hasta convertirse en lo que es hoy, un lugar pujante, muy buscado por los jóvenes para vivir, que dejó atrás momentos de inundaciones gracias a incontables obras de infraestructura y sigue creciendo. Vamos a festejar en comunidad con una gran fiesta gratuita e igualadora, y a la que están invitados todos los vecinos”, expresó Gustavo Posse, intendente de San Isidro.

En la celebración -que se realiza en recuerdo de la llegada del primer tren a la nueva estación del ferrocarril el 29 de marzo de 1909 (fecha que se toma como fundación de Villa Adelina)- habrá canto colectivo del Feliz Cumpleaños, torta compartida y la explosión de la tradicional piñata que volcará golosinas sobre las cabezas de los más chicos.

Durante la tarde habrá una kermesse para grandes y chicos, donde aquellos que participen podrán llevarse grandes premios. También una serie de postas deportivas, a cargo de la Secretaría de Deportes del municipio, para ponerse en movimiento bajo la mirada atenta de expertos.

En el predio será posible cruzarse e interactuar con los divertidos clowns de la escuela de Marcelo Katz; y, al dejar el paseo, los vecinos se encontrarán con plantines de especies autóctonas que se entregarán gratis en el stand de la Dirección de Ecología y Conservación de la Biodiversidad de la Comuna.

Además, funcionarán algunos espacios gastronómicos a cargo de organizaciones locales para degustar cosas ricas.

Para el cierre, cerca de las 17:00, la música en vivo llegará al escenario con La Bomba de Tiempo. Una experiencia única por la que pasaron más de cinco millones de personas en distintas partes del mundo y que antes de la pandemia, en 2019, agotó entradas en Barcelona, Madrid, Berlín y Londres. Ritual de ritmo e improvisación a partir de un sistema propio de más de 70 señas, y también de movimiento y energía, todo animado por tumbadoras, chekerés, tambores de todos los tamaños, congas, campanas, zurdos, djembé, güiras y más instrumentos, con una quincena de músicos en escena.

En caso de lluvia, el evento pasará al domingo siguiente.