El epicentro del encuentro en Olivos estuvo en el área metropolitana y los distritos más afectados, como Chaco. Preocupación por las villas. El Presidente anunciará mañana la extensión junto a Rodríguez Larreta y Kicillof

Alberto Fernández dedicó buena parte de su tarde a escuchar a los especialistas del comité de emergencia que lo asesora desde mediados de marzo y consiguió el aval científico para extender la cuarentena por dos semanas más con especial foco en el área metropolitana, donde las restricciones continuarán cómo hasta ahora e incluso habrá ajustes en el transporte público entre jurisdicciones.

De vuelta de su viaje por Tucumán -el Presidente durmió anoche en esa provincia-, Fernández recibió a la tarde en el quincho de Olivos a un grupo reducido de los infectólogos y epidemiólogos que lo aconsejan desde que el coronavirus avanzó en el país y que dieron luz verde a la prórroga que será anunciada mañana con el mismo formato que hace dos semanas: con la presencia de Axel Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta.

Los especialistas, según pudo saber este medio, avalaron las restricciones en el transporte público que circula por el área metropolitana y en las que avanzaron ayer los funcionarios de Nación, Ciudad y Provincia en una reunión en Casa Rosada encabezada por Santiago Cafiero que se extendió hasta última hora de la tarde.

Desde la próxima semana, los colectivos y trenes estarán reservados solo para trabajadores esenciales. Habrá nuevos permisos. Y un fuerte control policial en el paso de las dos jurisdicciones.

Y pidieron hacer hincapié en los barrios populares, que al menos en la Ciudad acaparan la mayoría de los nuevos contagios desde hace ya más de una semana.

El ministro de Salud, Ginés González García, que participó de la reunión junto al Presidente, Cafiero, la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, y la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca, había adelantado a mediados de semana la Casa Rosada analizaba una estrategia diferenciada en las villas.

“Es una decisión presidencial. Tenemos ahí una situación que no hace para nada que tengamos que pensar en cambiar. Pero los matices empiezan de otra manera. Estamos pensando en si va a haber algún matiz para barrios vulnerables, pero eso se decidirá”, había dicho el ministro.

El aumento de contagios de los últimos días -el registro oficial de este viernes reportó 718 nuevos casos de COVID-19- empezó a alertar mucho más a las autoridades políticas y sanitarias.

Los especialistas, en ese sentido, reiteraron la necesidad de que el Estado instrumente controles más estrictos en los barrios humildes. Es por donde pasa, según las fuentes, el foco de la nueva etapa del aislamiento que el Presidente anunciará este sábado para las próximas dos semanas: evitar aglomeraciones en el transporte público e ir en busca de contagios a las villas.

Esta tarde, el ministro Mario Meoni visitó la terminal de cruceros del Puerto de Buenos Aires, paralizada por el freno en la actividad turística, que a partir de la próxima semana funcionará como centro de asistencia para los vecinos del Barrio 31.

La iniciativa formó parte del menú del cónclave que Fernández, Kicillof y Rodríguez Larreta compartieron en Olivos, en la noche del miércoles, junto a los funcionarios de Transporte y Salud de las tres administraciones. Un encuentro que, además, sirvió para bajar las tensiones políticas.

Como trascendió ayer, además del transporte y los barrios carenciados, no habrá apertura de nuevas actividades ni en la ciudad ni en la provincia de Buenos Aires.

“Mañana va a informar el Presidente”, aseguró uno de los expertos que participó del encuentro en Olivos.

La atención, sin embargo, se posó también en estos días en Chaco, el otro distrito que preocupa a nivel sanitario. Es la tercer provincia con mayores contagios -el registro de este viernes reportó 29 casos-, detrás de la Ciudad y la Provincia, y por encima de Córdoba y Santa Fe.

Tras la reunión con los expertos, el jefe de Gabinete se abocó a una ronda de consultas con los gobernadores: en agenda había pautada una comunicación virtual para la mañana de este sábado con los mandatarios, pero solo con aquellos que tienen circulación del virus. “No tiene sentido hablar con Gildo (Insfrán)”, explicaban en alusión a Formosa, que nunca tuvo casos de COVID-19.

Es que hay provincias que, de a poco, empiezan a volver a la nueva normalidad. Santa Cruz, por ejemplo, ya tiene el aval de la Casa Rosada para habilitar restaurantes y confiterías con protocolos sanitarios. En Corrientes, harán lo propio con gimnasios y bares. Ninguna de las dos provincias tiene nuevos contagios.