Fue en la ciudad de Grand Bourg. Las áreas intervinientes constataron diversas irregularidades en una vivienda sin permiso para desarrollar el cuidado de adultos mayores. Las personas que estaban internadas en el lugar ya están con sus familiares.


En un trabajo mancomunado, el Municipio de Malvinas Argentinas clausuró un segundo geriátrico en el distrito en menos de una semana. Ante la alerta por el Covid-19, los trabajos y controles periódicos se han incrementado, pensando en el bienestar de la sociedad en su conjunto y sobre todo de la tercera edad.

En el lugar, ubicado en la ciudad de Grand Bourg, se detectaron diversas irregularidades. La vivienda no tenía permiso para desarrollar el cuidado de adultos mayores.

El subsecretario de Medio Ambiente del distrito, Mauro López Osornio, comentó: «El viernes recibimos una denuncia acerca de un geriátrico no regularizado, sin ningún tipo de trámite ante la Municipalidad, con ninguna medida sanitaria, entonces decidimos el lunes con un equipo multidisciplinario (Inspecciones, Legales, Fiscalización y Medio Ambiente) ir al lugar. Fuimos acompañados por personal de Salud, con sus correspondientes equipos de seguridad epidemiológica. Ingresaron los médicos y constataron que había dos mujeres mayores en el lugar, en estado regular de salud, sin sintomatología de Covid-19. La encargada dijo que lo hacía gratuitamente y que cuidaba solo familiares».

Además, el funcionario explicó: «Hicimos la correspondiente denuncia policial. Intervino la Comisaría de Grand Bourg y un funcionario de la Comisaría ingresó con dos médicos. La dueña quería impedir que ingresemos a un sector ya que decía que era un departamento que ella le alquilaba a otra persona y no se podía entrar. Nosotros teníamos audios que decían que había más pacientes de los que habíamos encontrado». «Finalmente el policía pudo entrar y verificó la presencia de dos pacientes más, un abuelo de 80 años y un hombre de 40 años con discapacidad. Estaban en estado regular de salud, pero el espacio era muy pequeño para las personas que habitaban allí, había una situación de hacinamiento, y sumado a que vimos que la conexión de electricidad desde el exterior hacia el interior era irregular, procedimos a la clausura del lugar», aseguró López Osornio.

El lugar fue clausurado el lunes, pero la dueña retiró las fajas de clausura. Por eso este martes, personal del Municipio volvió al lugar para labrar nuevas actas y volver a colocar las fajas de clausura.