Se trata de una iniciativa municipal que atiende y entrega anteojos a los chicos de jardines y primarias del distrito. Para llevar un control oftalmológico integral de la primera infancia, a través de estas acciones se concentran los Programas Prosane, Saludín y Ves.
A poco más de dos años de la inauguración del Hospital Oftalmológico construido por el Municipio, sus servicios alcanzan paulatinamente a la totalidad de los vecinos de San Fernando, desde niños hasta gente de la tercera edad. De este modo, se lleva adelante su integración a través de la concreción del Programa de Salud Escolar a partir de la entrega de lentes que concentra tres iniciativas: Prosane, Saludín y VES (Visión, Educación y Salud).
La Directora del Programa de Salud Escolar, Paula Caldara, explicó: “Hoy empezamos a hacer la entrega de anteojos conjuntamente con talleres con los padres. Los papás se fueron conformes, hicieron preguntas y pudieron entender en qué mejoraba el uso de los anteojos la calidad de vida de los chicos y lo que implica para el aprendizaje tener la visión en condiciones”.
A través del Programa de Salud se realiza el control oftalmológico en jardines y primarias del distrito. Una vez identificado los casos, se derivan al Hospital Oftalmológico y se ejecuta su posterior entrega. Acerca del procedimiento, la especialista indicó: “Cuando detectamos una dificultad en los chicos, se les da una fecha específica con la oftalmopediatra en el Hospital Oftalmológico Municipal y de ahí iniciamos un circuito donde lo mandamos a la óptica y después nos entregan los lentes. El servicio es rápido, entre 15 y 20 días llegan los anteojos”.
“Estas acciones importantes que realiza el Municipio se solventan gracias al apoyo de los contribuyentes a partir del pago de sus tasas”, aclaró Caldara.
Cristina, una de las madres que recibió los anteojos para su hija Jazmín, reconoció: “La verdad que no me lo esperaba, yo pensé que iba a venir a retirar y me iba, pero los profesionales nos explicaron muy bien. Es la primera vez que tenemos los lentes y aprendí mucho”.
“Este programa está muy bueno, gracias al Municipio tenemos la oportunidad de que nuestra hija tenga los anteojos y nos dieron una charla informativa muy buena”, agregó Jorge.
Por su parte, la vecina Liliana comentó: “Me parece buenísima porque a las mamás que no pueden tener acceso viene bárbaro. El proceso fue muy rápido, detectaron que mi nena tenía miopía y astigmatismo en el colegio. Me vino bárbaro porque si era por mí, ni me daba cuenta”.
Por último, Silvina, mamá de Leandro también compartió su opinión acerca de la iniciativa: “A mi hijo le habían recetado anteojos cuando era más chico, pero como no teníamos para pagarlos no los pudo usar y ahora gracias al Municipio puede tener sus anteojos”.